Una vez colocado correctamente el animal al interior de la máquina, un tubo penetra la cavidad torácica quitando el paquete intestinal y las mollejas de manera totalmente automática por depresión.
Cuando el tubo sale del animal, la aspiración sigue luego permitiendo al paquet intestinal ser completando eliminado.
La utilización de esta máquina garantiza un nivel higiénico muy elevado de la fase de eviscerado puesto que la operación se realiza por depresión directamente al interior del animal. Por tanto no hay perdida de líquidos sobre la canal externa.